Lo que comenzó como un pánico entre los educadores acerca de hacer trampa usando ChatGPT ahora generó preocupaciones más amplias.
Sam Altman, director ejecutivo de la empresa de inteligencia artificial que creó ChatGPT, testificó ante el Congreso el martes cuando los legisladores pidieron nuevas reglas para guiar el rápido desarrollo de la tecnología de inteligencia artificial.
Su puesta en marcha de San Francisco ganó rápidamente la atención del público a fines del año pasado cuando lanzó ChatGPT, una herramienta de chatbot gratuita que puede responder preguntas con confianza y de manera humana.
Lo que comenzó como un pánico entre los educadores por hacer trampa usando ChatGPT ahora se ha convertido en preocupaciones más amplias sobre la capacidad de la última generación de herramientas de "IA generativa" para engañar a las personas, difundir mentiras, violar las protecciones de derechos de autor y alterar ciertas obras.
Si bien no hay señales inmediatas de que el Congreso esté trabajando en nuevas reglas generales para la inteligencia artificial, los legisladores europeos sí lo están, y las preocupaciones sociales llevaron a Altman y otros líderes tecnológicos a la Casa Blanca a principios de este mes e impulsaron a las agencias estadounidenses a comprometerse a tomar medidas enérgicas contra los abusos. . AI.inteligencia artificial, productos que violan los derechos civiles existentes y las leyes de protección al consumidor.
"La inteligencia artificial necesita urgentemente regulaciones y salvaguardas para abordar su enorme promesa y sus peligros", dijo en un comunicado el senador Richard Blumenthal (D-Conn.), presidente del Subcomité de Privacidad, Tecnología y Leyes del Comité Judicial del Senado.
Fundada en 2015, OpenAI también es conocida por otros productos de inteligencia artificial, incluido el generador de imágenes DALL-E. Microsoft ha invertido miles de millones de dólares en la puesta en marcha e integró su tecnología en sus productos, incluido el motor de búsqueda Bing.
Altman también planea comenzar una gira mundial este mes a las capitales nacionales y las principales ciudades de los seis continentes para discutir la tecnología con los legisladores y el público. El lunes cenó con docenas de legisladores estadounidenses antes de testificar en el pleno del Senado, y varios de ellos dijeron a CNBC que estaban impresionados por sus comentarios.
También la jefa de privacidad y fideicomiso de IBM, Kristin Montgomery, y el profesor emérito de la Universidad de Nueva York, Gary Marcus, un grupo de expertos en inteligencia artificial que insta a OpenAI y otras compañías tecnológicas a dejar de desarrollar modelos. Inteligencia artificial más potente. Seis meses, dando al público más tiempo para considerar los riesgos. La carta fue en respuesta a GPT-4, el último modelo de OpenAI que se lanzó en marzo y se describió como más poderoso que ChatGPT.
“La inteligencia artificial se transformará de maneras que ni siquiera podemos imaginar, afectando las elecciones, los empleos y la seguridad de los estadounidenses”, dijo el senador Josh Hawley de Missouri, republicano en la comisión. "Esta audiencia marca un primer paso fundamental para comprender lo que debe hacer el Congreso". Altman y otros ejecutivos de la industria tecnológica dicen que agradecen algún tipo de supervisión de la IA, pero desconfían de lo que ven como regulaciones demasiado estrictas.
En sus comentarios preparados, Montgomery de IBM instó al Congreso a adoptar un enfoque de "precisión regulatoria". "Esto significa desarrollar regulaciones para guiar la implementación de IA en casos de uso específicos, en lugar de regular la tecnología en sí", dijo Montgomery.
